A continuación te damos unas cuantas ideas para tus propios productos del erotismo:
- Aceites esenciales afrodisiacos. Para ello recuperaremos el masaje erótico como un modo de conexión con el cuerpo. Estos aceites son magníficos para realizarlos porque son muy deslizantes y dejan la piel muy hidratada. Siempre daremos estos masajes iniciando en un modo de relajación para después ir subiendo de intensidad empezando a masajear los diversos puntos erógenos de tu pareja. Te sorprenderá el grado de excitación que se puede conseguir.
- Geles comestibles o cremas de chocolate. En el caso de no disponer de estos geles, todos podemos tener a mano cremas de chocolate en casa, donde puedes untarte tu cuerpo para que tu pareja lo vaya “limpiando” poco a poco.
- Corbatas, lazos y pañuelos. Se pueden usar para inmovilizar a la pareja de la manera que los dos estéis de acuerdo, o bien las manos, las piernas o ambas cosas, y también para tapar los ojos dejando a nuestra pareja a nuestra merced. Cuando se eliminan los estimulos visuales y la capacidad de movimiento, se potencia muchísimo el resto de sensaciones, sobre todo en la mujer.
- Pluma o plumero. Si no tienes en casa se puede encontrar muy fácilmente. Las plumas aplicadas para acariciar el cuerpo produce unas sensaciones de cosquilleo muy excitante, y si además lo haces tapando los ojos a la persona que se lo aplicas, se derretirá de placer.
- Cubito de hielo. Todos conocemos el juego del cubito de hielo resbalando por todo el cuerpo y produciendo un escalofrío muy agradable que promete sensaciones aún mejores, pero si lo que queremos es excitar la zonas genitales, es mejor utilizar helado, ya que no es tan frío, permite lamer la zona donde se aplica y el contraste entre el frio del helado y el calor del aliento resulta de lo más estimulante.
Vivimos rodeados de erotismo, pero nos hace falta abrir mas los ojos para verlos. Recuperemos el placer de la imaginación.